El estilo moderno

¿Qué son las casas modernas? Se pueden interpretar de muchas formas. Pero la que más se acerca a su definición original es la que se remonta a la arquitectura moderna. Incluso a la fundación de la escuela de arte, diseño y arquitectura Bauhaus, del siglo XX. Su fundador, Walter Gropius, trató de proyectar la arquitectura desde el punto de vista más funcional, añadiendo una nueva estética. Todo aquello que se define como moderno tiene una estructura y/o diseño muy marcado, con espacios amplios y bien iluminados. Una arquitectura más cúbica y mucho más atractiva para las personas. Es por ello que tiene tanta fuerza este estilo y sobresale ante el resto de estilos arquitectónicos. Los principales elementos por los que gusta tanto el diseño moderno son:

 

Simplicidad

Menos es más. Por eso nos encanta tanto este estilo, porque conjuga perfectamente su filosofía con la nuestra. Una arquitectura sencilla y limpia que se conjuga a través de líneas rectas. Este estilo evita las líneas curvas y apuesta por las superficies lisas y depuradas. Esto puede recordar al minimalismo. Y es que lo moderno comparte características con otros estilos, como son también el nórdico y el industrial.

 

Luminosidad

Los grandes ventanales son un denominador común en estas casas. Es su sello distintivo con respecto al resto. La iluminación es vital, por eso unas ventanas grandes harán que ingrese la máxima cantidad de luz en la vivienda. Además, harán que los espacios interiores sean aún más amplios. Los espacios abiertos, también comunes en este estilo, harán que tu hogar tenga aún más luz natural y, además, de la sensación de ser muy espacioso.

 

Espacios

La funcionalidad es otra de las características principales del estilo moderno. Todo aquello que no sirva o no se vaya a utilizar queda fuera. Los muebles o materiales que sí se vayan a usar habitualmente y cumplan la función por la que se compraron seguirán en el hogar. El estilo moderno huye de la sobrecarga de espacios y la ornamentación. Cuantos menos muebles y menos decoración, mejor. Y esto se cumple para todas las estancias.

Los balcones destacan también. Estos suelen ser de vidrio, ya que la impresión visual que dan es fascinante. Todos los materiales translúcidos son buena opción, pues resaltan, especialmente por la noche cuando las luces están encendidas. Otros materiales que se emplean son, por ejemplo, el ladrillo, la piedra natural y el hormigón. La madera y el cuero, entre otros, se emplean en el interior de la vivienda.

En cuanto a los colores, el blanco es el predominante. Los colores neutros son los más utilizados, por eso, los marrones, grises y el negro son los que hacen el contraste. El objetivo es crear una armonía en cada estancia, sin hacer que ningún color resalta, especialmente, sobre el resto.

IMAGEN BLOG 2.8.23

En 2M-Arquitectos nos preocupamos por tu comodidad y te ayudamos a conseguir tu casa ideal. ¡Contáctanos!

Tu Comentario