Vivir con niños no significa renunciar al diseño y la armonía en casa. De hecho, crear un hogar bonito, cómodo y funcional es posible si se tienen en cuenta las necesidades de los más pequeños sin descuidar el estilo. Te contamos cómo lograr una decoración para casas con niños sin perder el estilo, combinando seguridad, practicidad y elegancia.
Claves para una decoración infantil con estilo
Materiales resistentes y fáciles de limpiar
Los niños están en constante movimiento, por eso es importante elegir textiles y superficies duraderos:
- Sofás con fundas lavables o antimanchas.
- Alfombras de fibras naturales o vinílicas, fáciles de limpiar.
- Pinturas lavables en paredes (idealmente con acabado satinado o semimate).
Muebles seguros pero con diseño
Apuesta por muebles con esquinas redondeadas y estables, pero sin sacrificar la estética:
- Mesas de madera con acabados suaves.
- Estanterías a su altura para fomentar la autonomía.
- Sillas ligeras, pero de diseño, que puedan mover ellos mismos.
Zonas de juego integradas
No hace falta tener una habitación exclusiva para jugar. Puedes integrar espacios de juego en el salón o dormitorio sin que desentonen:
- Cestos de almacenaje bonitos (de yute, tela o ratán).
- Tipis o carpas decorativas.
- Pizarras o paneles creativos en una pared.
Estilo y colores: equilibrio entre niñez y elegancia
Paleta de colores suaves y atemporales
Olvídate de los tonos estridentes. Los colores neutros, pastel o tierras crean ambientes relajantes que se adaptan al crecimiento del niño y al conjunto del hogar.
Puedes apostar por tonos arena, grises cálidos, verde oliva claro o azul cielo para dar un toque infantil. Añade más color mediante textiles como cojines y alfombras que puedas renovar con el tiempo sin necesidad de grandes cambios.
Decoración versátil y evolutiva
Elige elementos decorativos que puedan cambiar con facilidad:
- Láminas infantiles intercambiables en marcos neutros.
- Vinilos removibles.
- Lámparas con diseño pero funcionales.
Organización: el secreto del orden (aunque haya juguetes)
El orden también es parte del estilo. Y aunque parezca difícil con niños, hay formas efectivas de mantenerlo:
- Cajones bajo la cama.
- Bancos con espacio interior.
- Estanterías abiertas para que ellos mismos recojan.
Puedes usar organizadores visuales para ayudarles a mantener el orden. Por ejemplo, etiquetas con dibujos, colores por categoría, paneles de tareas.
Una casa con niños puede ser estilosa, acogedora y funcional. La clave está en elegir materiales adecuados, integrar zonas infantiles sin romper la armonía y apostar por una organización que involucre a los peques.