En los últimos años se ha pasado de grandes casas con jardín a pequeños pisos, donde cada centímetro cuadrado vale oro. Hoy, la funcionalidad y comodidad es lo más importante para un hogar, y no tanto el espacio. Pero igual de relevante es saber cómo sacar partido a esos metros. Decorar, almacenar y sentirte a gusto con tu vivienda. La creatividad debe volar y, junto a ella, podrás conjugar todo lo que necesites en un piso pequeño pero práctico para el día a día.
Empieza por la distribución
Como comentamos, los metros cuadrados son indispensables, pero si se distribuye cada estancia en el lugar indicado no importarán tanto. Una de las fórmulas más empleadas en estos casos es eliminar las paredes y crear conceptos abiertos. Esto se da, especialmente, entre la cocina y el salón. Ambas estancias se convierten en una sola sin necesidad de tener un tabique en medio. Esto, además, dará sensación de amplitud. La distribución de los muebles también tiene peso, ya que será más funcional y definirá bien cada zona.
Los pasillos son más funcionales de lo que crees. Puedes colocar muebles con mucha altura para guardar abrigos o bien un zapatero. No obstante, hay pisos que no tienen pasillo. En este caso, esos metros se emplean en el resto de estancias, por lo que también ganas espacio en ellos y resulta igual de funcional.
El estilo minimalista es el que mejor conjuga con el espacio justo o escaso. No sobrecargar el ambiente ayudará a ver más espacio del que hay. La decoración sencilla hará que tengas solo aquello que necesitas a diario y te desharás del resto.
Muebles funcionales
El mobiliario es la segunda característica más relevante. Se puede encontrar más espacio útil en diferentes muebles. Por ejemplo, escoge una cama con canapé. De esta forma, podrás almacenar y guardar algunas cosas debajo, sin que estorbe y sin que sea visible. En el caso de la cocina, las barras son una opción muy práctica para comer. También puedes optar por una mesa pequeña plegable, así la podrás abrir si tienes invitados.
En el salón puedes tener un sofá cama, una opción muy interesante si te gusta que tus familiares o amigos se queden a dormir en tu casa. Opta por muebles ‘aéreos’ en esta estancia, ya que visualmente parecen más espaciosos.
Colores y luminosidad
En pisos pequeños, el color por excelencia es el blanco, ya que transmite serenidad. Sin embargo, otros colores suaves como el beige o el gris, o colores pastel, también son buena opción. Los colores influyen en nuestro estado de ánimo, por eso hay que escoger aquel que dé personalidad a tu hogar, pero que también te deje descansar.
En la cocina puedes elegir un gris claro y en el baño colores suaves como un azul cielo o blanco. Los colores oscuros y fuertes no deben entrar entre tus opciones, pues visualmente reducen el espacio. Ligado con las paredes y la elección del color está la luminosidad. La luz solar es vital para los pisos pequeños, ya que se verá más amplio.
En este caso, las cortinas no son una buena opción, pues no dejarán pasar la luz. Las lámparas deben ser pequeñas para no ocupar mucho espacio. Puedes optar por apliques, ya que al estar sujetas en la pared no quitarán espacio. Es una buena opción para las habitaciones y muy estética.