Mantenerse en forma y sano es fundamental. En el día a día, encontrar tiempo para ir al gimnasio puede ser todo un reto. Pero para todo hay una gran solución. En este caso, plantéate montar un gimnasio en casa. ¿Por qué no? Es la manera más conveniente y efectiva si realmente quieres hacer deporte y mantener bien tu salud. Y, así, no hay excusas. Esta es una idea invaluable. La comodidad, privacidad y ahorro de tiempo son solo algunas de las razones por las cuales cada vez más personas optan por crear su propio espacio de fitness en casa. ¿Te animas? Te contamos cómo debes hacerlo.
Ubicación
Antes de comenzar a comprar máquinas y otros accesorios, piensa en el espacio disponible que tienes en tu vivienda. No necesitas una habitación grande; incluso un rincón puede ser transformado en un gimnasio funcional. Considera el espacio vertical, utilizando estanterías para almacenar equipo cuando no esté en uso. Si apenas tienes una zona donde crear tu gimnasio, el ejercicio de fuerza se vuelve más complicado de entrenar. Esto se debe a que en muchas ocasiones el dormitorio se convierte también en el gimnasio. Una buena opción si no hay otro espacio. En él puedes colocar una máquina de cardio (como una bicicleta), una esterilla, bandas elásticas, mancuernas …
No obstante, si tienes un sótano sin vida, esta es la mejor zona donde instalarlo. Especialmente si vas a trabajar la fuerza. Un espacio más amplio y específico para el deporte, con capacidad de albergar máquinas de gran tamaño y peso. Aquí podrás tener muchas más máquinas de fuerza, de cardio … Además, el ruido no pasará a otras habitaciones colindantes, por lo que tu familia no se quejará del ruido que haces mientras entrenas.
Luz y ventilación
Elige un lugar con acceso a luz natural y a una buena ventilación. Esto no solo hará que tu espacio sea más agradable, sino que también contribuirá a un ambiente más saludable para entrenar. Colocar espejos estratégicamente ayudará a distribuir la luz por el gimnasio, así como ampliar visualmente el espacio. La iluminación adecuada es crucial para ver si estás ejecutando bien cada ejercicio. Por eso, combina luz natural con fuentes de luz artificial para evitar sombras molestas o la escasez de iluminación. Las luces regulables son una buena opción
Los colores de esta estancia ayudarán mucho en esto. Opta por colores que te inspiren y motiven. Tonos energéticos como el rojo o el naranja pueden aumentar la vitalidad, mientras que el blanco y el verde transmiten una sensación de frescura. Incluye también elementos decorativos que te motiven, como carteles inspiradores o imágenes de tus metas fitness. Y, por supuesto, que no se te olvide la música.
Equipamiento esencial
Las pesas y las barras no pueden faltar en el entrenamiento de fuerza. Permiten una gran variedad de ejercicios para todos los grupos musculares. Por lo que, con ellos, podrás tener un entrenamiento completo. Pero tienes que cuidar muy bien la técnica.
Sin embargo, puedes incluir otras máquinas como una de remo, una prensa o una guiada. Y, por supuesto, bancos y mancuernas. Puedes completar tu entrenamiento con flexiones y dominadas y con cardio. Para ello, selecciona una máquina cardiovascular según tus preferencias y espacio disponible. Las cintas de correr, bicicletas estáticas y elípticas son opciones populares. Si el espacio es escaso, piensa en otros que no requieran de máquinas, como saltar la comba. Quemarás calorías y ganarás resistencia.
Puedes incorporar otros elementos como pelotas medicinales, bandas de resistencia y kettlebells. Las máquinas multifunción son ideales para ahorrar espacio y ofrecer una variedad de ejercicios.
Con todo esto solo quedaría establecer un horario y una rutina para tu entrenamiento. ¡Y ya estarás preparado para comenzar tu deseada vida saludable! Crear un gimnasio en casa es una inversión en tu salud y bienestar a largo plazo. ¡Prepárate para disfrutar de la comodidad y la flexibilidad de tu nuevo gimnasio!
